Encargos entregados

De vez en cuando, suena la flauta y me hacen algún encarguillo, que me ayuda económicamente a seguir sufragando mi taller. De algunos me queda el recuerdo y de otros alguna imagen y los bocetos, de los que nunca me deshago, parezco el "recogetodo" de Léolo, en cada trozo de papel encuentro una historia, un recuerdo... propio o ajeno..


El primero, tiene muchos años, y un valor especial. El objetivo, conmemorar la inauguración de la tienda de mi madre, Amazonas Centro de Luz. Seguro, hoy, habría hecho algo completamente diferente, pero esto es lo que salió entonces y con bastante éxito debo decir.

Los bocetos previos. Me lo pasé como una enana 
Y el resultado final, me di una gran paliza, la idea de hacer la plancha doble, me pareció en su momento muy buena, a medida que fui estampando y entintando... no sé qué tenía en la cabeza en ese momento...
Todo "artista" tiene su mecenas, el mío, sobre todo durante mi estancia en Granada, se puede decir que fue María, una gran amiga y parte de la familia prácticamente. Los dos cuadros que estaban destinados a ella y que valora como santuario (y lo digo con un orgullo y agradecimiento enorme) se pintaron prácticamente solos y para ella. No he hecho nada parecido desde entonces.







El siguiente grabadín, para YMCA, fue con motivo de unas jornadas de paz, realizadas en Valladolid y a la que acudieron voluntarios de todo el globo. El grabado en cuestión, era el detalle de recuerdo que muchos se llevarían allende los mares.

 Ante todo, la calidad/técnica/relización, es acorde al tiempo (escaso) de realización, coste y facilidad de ejecución/estampación. Lo que si creo, es que es diferente.

Y bueno, esto es un gran recuerdo de un no muy fácil verano, en casa de una de mis mejores amigas. Menuda terapia...